Desde de junio de 2011 tengo mi taller en el pequeño pueblo de Mogán, un pueblo de 200 personas, escondido en las montañas, a unos 7 kilómetros del pueblo turistico de Puerto de Mogán, el puerto yating donde tengo dos veces por semana un puesto en el mercado.
Parece que cuanto más viejo me hago, más me convierta en un ermitaña a tiempo parcial.

Me gusta la vieja casa en que estoy viviendo actualmente, las campanas de San Antonio de Padua que me despertaba cada mañana (esto incluye los domingos!) y dar una estructura a mi día.

Mi estudio está en un cobertizo de madera aquí en la propiedad, equipada con dos turbinas de escape, un motor de Fortiflex colgado, diversos motores de mano, fresas y un sinnúmero de aproximadamente media tonelada de papel de lija y de pulir.